El instituto Riken de Investigación de Japón ha diseñado una “supercomputadora” que permitirá realizar estudios proteínicos a una velocidad inédita hasta ahora para el desarrollo de fármacos.
Interrumpo – Yo aun pienso que estas tecnologías cuando son experimentales como se suponen que lo son, cuando sean capaz de descifrar a un nivel incompresible, es decir – a mayor que la velocidad del pensamiento, no serán utilizadas para el bien humano. Es la naturaleza humana de los encargados de estos proyectos que se vuelven locos por alguna razón y se creen que son una raza mejor que los demás y solo merece salvación aquel que se la sople.
La institución, cuya financiación es pública, ya ha concluido el diseño básico y tiene previsto tener operativo este año el equipo en su Centro de Ciencias de Computación Avanzadas de la ciudad de Kobe, donde se aloja también la famosa “supercomputadora K” (la más rápida de Japón), informó hoy el diario económico Nikkei.
La máquina será capaz de generar, en tres dimensiones, modificaciones en estructuras proteínicas en un sólo día, unas 100 veces más rápido que la “supercomputadora K”, que pese a ser más potente consta de unas funciones mucho menos especializadas.
Hitachi ha contribuido al desarrollo de la tecnología para el proyecto, que tiene un coste estimado de unos 800 millones de yenes (7,55 millones de dólares).
La velocidad con la que los investigadores son capaces de generar modelos en tres dimensiones de estructuras proteínicas y de los cambios que se producen en las mismas por efecto de la enfermedad resultan clave hoy en día para el desarrollo de nuevas terapias.
Ya que la biotecnología juega un papel cada vez más primordial en el tratamiento de enfermedades como el cáncer y que el uso de supercomputadoras es cada vez más común entre grandes farmacéuticas de Europa y EEUU, el nuevo proyecto puede dar un importante impulso competitivo a las firmas y universidades niponas que lo empleen.
Dentro de su programa económico, el primer ministro de Japón, Shinzo Abe, busca convertir la investigación médica en un pilar básico del crecimiento económico nipón.
La simulación más exacta del cerebro humano hasta la fecha se ha llevado a cabo en una supercomputadora japonesa, tomando un solo segundo valor de actividad de sólo el uno por ciento de un órgano complejo, lo que tardo a uno de los superordenadores más potentes del mundo, unos 40 minutos para calcular.
Los investigadores utilizaron la supercomputadora K en Japón, actualmente el cuarto más poderoso del mundo, para simular la actividad del cerebro humano. El equipo tiene 705.024 núcleos de procesador y de 1,4 millones de GB de RAM, pero todavía tardó 40 minutos para crujir los datos por sólo un segundo de actividad cerebral.
El proyecto, una empresa conjunta entre el grupo de investigación japonés RIKEN, el Instituto de Okinawa de la Ciencia y Tecnología de la Universidad de Graduados y Forschungszentrum Jülich, un centro de investigación interdisciplinar con sede en Alemania, fue la mayor simulación de la red neuronal hasta la fecha.
